El insomnio tiene cosas malas, no duermes, las horas pasan y pasan, yo suelo dar vueltas y vueltas en la cama, lloro, siento impotencia por no poder dormirme, a veces es fruto de una preocupación, otras porque la mente no puede dejar de funcionar, otras porque sin más, no toca dormir... Esas son las cosas malas, el día es horrible, estás ausente todo el día y lo más curioso, siempre consigo dormirme a las 6:30 - 7:00 horas, esa es mi hora de dormir, como es normal, es la hora de levantarte; siempre me ha llamado la atención que sea justo a esa hora y no a otra, algún día lo descubriré... Las cosas buenas, que no sueño, no hay pesadillas, no hay malos sueños, no hay Premoniciones... Hoy mi hermana me ha preguntado que si he soñado algo estos días, le he respondido que sí, he tenido sueños raros, pesadillas, pero han sido tan fugaces que conforme despertaba, ellos se esfumaban. He tenido varios sueños, el destino ha jugado sus cartas y ya está decidida la partida; me duele enormemente el no poder decir a ciencia cierta, sí, va a pasar, pero sé que va a pasar. El viernes mi alma se retorció, no puedo callar que el desenlace está cerca, pero no puedo decirlo cuando es alguien tan tan tan cercano, y cuando su pérdida va a crear tanto desaliento, que prefiero callar, decir que mi insomnio no me deja ver con claridad, que decir, sí y muy pronto... No puedo hacerlo, esta vez me sorprenderé y diré, No lo soñé.
P.D.: El destino decide, igual que con todo, solo es cuestión de tiempo de que la partida finalice y que por tanto, nos miremos a las caras y digamos, "es lo que hay, así que no luches contra ello..."
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